viernes, 28 de julio de 2017

Entrega (verso a ti)

Parte mi corazón en mil pedazos
Y vierte mi ser dentro del mar
Ya siento perder la fuerza de mis brazos
Y poco a poco dejare de respirar...

Soy ese hombre que ha de amarte
Y que le gusta imaginar
Que piensa solo en abrazarte
Y sobre un lienzo tu ser divino dibujar

Solo deseo el amanecer de un nuevo verano
Tal vez beber una taza de café
Probar la miel que hay entre tus manos
Y que me digas ¡Ven mi vida te extrañe!

Pero tu silencio es mi locura
Y la noche desesperación
Si en la mañana no encuentro cura
Quitaré de mi pecho el corazón...

Pero no de la manera en que parece
ni de la forma que has de imginar
lo sacaré porque tú te lo mereces
Y porque es tuyo ¡No lo puedes regresar!

jueves, 27 de julio de 2017

Percepción (Imaginación)

Este es cuento chiquito
Solo dura un segundo 
Había una vez un mundo
Haber si no los confundo...

¡Hola! Dijo a la playa 
Disfrutando del viento 
Estaba tan contento
Yo lo escuche no miento...

¡Vuelen libremente! 
Le dijo a dos loros 
Se oyeron varios coros
Era un cuarteto de toros...

¡Todos pueden cantar! 
Y bailaron las medusas 
Con ritmo de semifusas
Animando a unas tusas...

¡Que corran los caballos! 
El mundo había hablado 
El mar seria salado
Y el durazno azucarado...

¡Que surja vida en la tierra! 
El Maíz se llenó de risa 
Un tomate salió deprisa
Y la flor se bebió la brisa...

¡Hombres sean libres! 
Todo se hizo un enredo 
Al valor lo venció el miedo 
Y más de uno cambio de credo...

¡Despertar a la verdad! 
El mundo gritó enardecido 
Oídos humanos atentos al ruido 
Muriendo solo al haber nacido...

¡Les entrego mi vida! 
De un valor inigualable 
¿Habría algún culpable? 
Tonto será el que no hable...

¡Son mi sangre, mi fe y mi voz! 
Lluvia surgió del cielo
Las nubes se hicieron velo
Y el ave emprendió el vuelo...

¡Les doy un sentimiento llamado Amor! 
Los sabios hicieron letras
Un millón de líneas los poetas
Y el que no entiende sus maletas...

¡El mundo dejo de hablar! 
¿Porque te has ocultado? 
La luz volverá a brillar 
Cuando realmente sea escuchado....

¿Dije un cuento pequeño? 
¡Osadía del que escribe! 
¡Soy fogata que arde al leño! 
Aprendiendo lo que vive...

domingo, 23 de julio de 2017

Microrelatos (Transformación)


Tenia una flor en mano y ese era el regalo perfecto para la ocasión. Minutos antes se dijo así mismo algunas palabras frente al espejo detenidamente. Había un secreto y si alguien no lo sabía pronto se daría cuenta que era él. Lo llamaron por su nombre y eso lo sorprendió aún más. Varias campanas sonaron dejando volar una melodía muy singular. El aire se detuvo por lo que el calor era ya insoportable. Pudo sentir una ligera presión en la mano, también la suavidad de su ropa e incluso asta el aroma en el ambiente. Gritó eufórico, quería ser escuchado, pues no sabía la razón del porque estaba ahí y mucho menos a lo que iba. Fue entonces cuando lo noto ¡Así es! ¡Su rostro era reflejado por el cristal que tenia enfrente. Él., ya no era el mismo, ahora pertenecía a otro mundo ¿Pero no estaba muerto? ¡Claro que no! Apenas empezaría a vivir, ya había despertado...

Brindis al Viento

Un conejo 
-Brindo con te de limón-
Y dijo 
-Hablo con insistencia-
Alzando su copa
-Que prendan el fogón-
Mirando al frente 
-No pongan resistencia-
La gente miró
-Esto es caminar seguro-
Con atención oían
-La actitud debe ser precisa-
Silencio se hizo
-Para comprender el futuro-
Todos callaron
-No debes respirar de prisa-
Copa en mano
-Hoy no existe el reproche-
Alguien quería hablar
-Siembra flores llamativas-
¿Es usted profeta?-
-El día sigue a la noche-
¡Eso es seguro! 
-¿Son sus almas caritativas?-
El joven se sentó 
-Tu oyes y opinas-
Todos voltearon
-¿Porque? No lo preguntes-
De nuevo el silencio 
-Aprender te llena de espinas-
Bajo la mirada
-Cuando con estudiosos te juntes-
¿Estamos en un error? 
-Nada esta equivocado-
¿Entonces? 
-Ten fe en el amor-
Escribieron
-Pero quita el candado-
¿Cual? 
-El de tu ser interior-
El conejo miró la hora 
-¡Amigos me voy!-
Solo dos personas
-Habrá que ir al centro-
¿A la ciudad? 
-Si existo no estoy-
¡Siga maestro! 
-Sean un todo ¡Como las nubes al viento!-

lunes, 3 de julio de 2017

La Rana y el Rey

Había una rana que no sabía leer. Un día le llegó una carta y pensó que haría con ella. Fue con el oso y le pidió le dijera lo que decía, el oso aceptó pero por hacer ese trabajo le cobraría veinte centavos. En la carta se le invitaba a un gran baile de gala en el castillo real pero debería de responder antes de una semana y para ello sólo sería a través de otra carta. La rana tenía otro problema, no sabía escribir. Entonces fue en busca de la jirafa, ella era una excelente escritora. Le pidió respondiera un agradecimiento y puntual presencia en el baile. La jirafa aceptó pero ella le cobraría 50 centavos por su trabajo. Los días pasaban y la fecha se acercaba. La rana debería buscar que se pondría para asistir al baile así que fue con la gallina costurera y pidió le hiciera un bonito vestido para la ocasión. La gallina cobraría por ese trabajo solamente 70 centavos y unas piezas de pan para los pollitos. El día del baile llegó y aún faltaba lo mas importante, el peinado. La rana tenía que hacer algo, así que fue con la mariposa. Nuevamente sabía que eso le costaría un poco mas y así fue. La rana ahora lucia un hermoso peinado de 90 centavos. Todo aquello le hizo pensar muchas cosas, antes de salir de su casa reviso su monedero, ahí se dio cuenta que sólo le quedaban 10 centavos. Toda esa semana no se había preocupado por trabajar. Entonces reflexionó, si hubiera aprendido a leer y escribir tendría un poco más de dinero. También se dijo así misma, un oficio me hubiera ayudado bastante después de haber aprendido algunas cosas. La rana sacó su moneda de 10 centavos y se propuso lo siguiente. La regalaré al primero que se cruce en mi camino y así el día de mañana lucharé por aprender cosas nuevas y un oficio que me ayude a tener solo lo necesario. Sin decir más se fue feliz al baile. Camino un poco y en la orilla de un gran árbol estaba sentado un viajero. Recordó sus palabras y le dio en mano su moneda de 10 centavos. Era lo último que tenía para ese día, pero no le importó ella estaba decidida en triunfar. Fue así que llegó caminando, el baile había empezado, la gente se divertía, la música era tan maravillosa que todo parecía un sueño. La rana bailo y bailo. Algunas horas después se despidió y volvió a su casa, en la entrada al castillo le dieron un sobre. Ella lo guardo y decidió no abrirlo asta que no aprendiera a leer. Paso el tiempo, la rana estudio aprendió a leer y escribir y ahora ya tenía un oficio, era florista. Una tarde se sentó en una fuente y saco aquella carta que tiempo atrás le fue entregada. En su interior había un billete de cien pesos y unas líneas escritas solo para ella y decían esto: "Vi en tus ojos bondad y decisión. Aunque no me conocías me entregaste lo último que tenias y eso no lo hace cualquiera. Te veías maravillosa al caminar, triunfante, alegre, motivada. Todos deberíamos de aprender de ti. Mi nombre no lo sabes pero te lo diré, soy leonardo, el rey del castillo a donde irías al baile. Gracias por compartir conmigo lo poco que tenias y en gratitud recibe este billete de 100 pesos". La rana lloró de emoción, ahora tenia mucho más de lo que ganaría en mucho tiempo. Sin embargo decidió hacer algo especial. Aquella tarde el rey recibió un elegante arreglo floral y una carta al mismo tiempo. Y esto la rana escribió:
"Aprender a leer me costó 20 centavos, escribir 50 centavos, dominar un oficio 80 centavos y dar todo lo que tenía solo 10 centavos. Pero mi mas grande tesoro no es los 100 pesos que me ha dado, esos los regalé al pueblo en su nombre para que hagan lo mismo que yo. Que el verdadero valor de las cosas no están monedas, sino en acciones y éstas valen más que muchos pesos". El rey supo mucho tiempo después que el pueblo tenía escuelas, la gente sabía oficios y que la rana era muy feliz en su estanque cuidando y admirado las flores.