martes, 7 de noviembre de 2017

Equilibrio

¿Que haces? 
¡Estoy buscando algo importante! 
¿Que es? 
¡Equilibrio!


Autor
Corazón de Muñeco

Cada loco con su tema

-¡Están borrando cerebros!-
-¿Donde?-
-En el Internet-
-¡Hay que hacer algo!-
-¡Un segundo busco en google!-


-¿Dónde cortas tu cabello?-
-¡En el centro! ¿Me veo bien?-
-¡Precioso!-
-¿Mi cabello?-
-No., el centro-


-¡A comer!-
-¿Quién guiso?-
-¡Pues yo! ¡A ti te toca levantar la mesa!-
-¿Y luego donde vamos a comer?-


-¿Oye?-
-¿Que pasó?-
-¿Ya viste al perro?-
-¡Ni loco, que tal si me muerde! Mejor vistelo tu-


-¡Señora su hijo me sorprendió hoy, se calló en mi clase!-
-¡Hay que lindo guardó silencio y se porto bien!-
-¡Nada de eso! ¡Se raspó las rodillas!-


-¡Estoy peleado!-
-¿Con quién?-
-¡Con las matemáticas!-
-¿Y eso?-
-¡Tuvimos un problema de puntualidad! Nos citamos a las cuatro y yo llegué a las 4.20!
-¿Y ella?-
-Fue exacta, llego a las cuatro-


-¡La Red social me tiene atrapado!-
-¿Que piensas hacer?-
-¡Dejar de navegar!-
-¿Eres adicto?-
-¡Permite mando un mensaje y ya!-


Autor 
Mauricio Zamora 
Seudónimo 
Corazón de Muñeco 
Ideas originales 
México 2017

Aprender

¡Debió de respirar! 
¿Murió? 
¡No! No aprendió


Autor
Corazón de Muñeco

Verdad (Diálogos Infantiles)

-¿A dónde va toda esa gente?-
-Van a oír la palabra-
-¿Algún sabio?-
-Siguen sus creencias-
-¿Y tú porqué no vas?-
-¿Yo? ¡Yo creo en Dios!-
-¿De verdad?-
-¡Si! El siempre esta junto a mi-
-Entonces no hay porque preocuparse, ellos pronto volverán con nosotros-


Autor 
Mauricio Zamora 
Seudónimo 
Corazón de Muñeco 
Diálogos Infantiles 
México 2017

viernes, 3 de noviembre de 2017

El Muerto

¡El muerto! ¡El muerto! Todos gritaban con temor. El día anterior enrollado en un petate lo cargaron asta el cementerio, la caminata fue algo distante, el coro nunca dejó de cantar sino asta que fue colocada la lápida. 
¡El muerto! En el sueño de algunas personas días después apareció, no fue la única ves que lo hizo, pedía comida, como si aún estuviera vivo y hambriento. El párroco creyó todo lo que se decía e hizo traer a familiares y amigos:
-¿En vida cuales fueron sus gustos?- Preguntó una y otra vez, el panadero hizo acto de presencia, según él, tenía una deuda con el difunto, pensó que era culpa suya lo que ocurría. 
Días después volvió a suceder lo mismo, ahora lo vieron cantando, bailando y bebiendo licor. Fue muy raro ya que el nunca bebió. La familia mas pudiente del pueblo mandó hacer una cripta muy elegante, aunque para que, el muerto siempre se quejo de ellos, pues le habían robado sus tierras. Y es que así era, como nunca quiso problemas no supo defender lo suyo, por eso lo vieron sembrando día a día bajo el calor del sol. Para vencer el temor mandaron bendecir cirios y veladoras, eran caras obviamente. 
-¡Don Santiago! ¿Porque no las regala?- varios preguntaron al dueño de la única bodega local, pero éste ni caso hizo. Josefina, la hija de la dueña del molino limpio la casa del muerto, vaya tiradero que tenía, pero eso ni le importó, lo hizo de muy buena gana. El pueblo estaba asustado, pues aún con el paso de los meses, el muerto, seguía apareciendo, ahora ya no se conformaba con los sueños. Decían que lo veían descansar en la hamaca de la entrada. 
Todo se había hecho, rezos, velas, misas y hasta guardias en su tumba que según eso ayudaría. El tiempo paso, la gente se acostumbró y ahora solo lo ven caminar llevando unas flores blancas entre las manos y un cigarro en la boca. Y aunque parezca increíble viste igual a un dibujo que hicieron de él. 
El pueblo había hecho su altar de muertos, todos aportaron algo y en su memoria lo dibujó Aurelio, un niño de 12 años. Lo plasmó de traje, flores y cigarro. Esa foto a mano decía todo, el muerto era el profesor del pueblo, que siempre daba de comer a los niños y por las tardes descansaba viendo el atardecer sentado en su hamaca, por eso nadie lo quería olvidar. Hasta que se dieron cuenta que siempre estaría ahí, pero ahora sin causar temor alguno....

Autor 
Mauricio Zamora 
Seudónimo
Corazón de Muñeco

Te Amo

Aquella tarde había olvidado lo más importante y quizás ya no volvería a tener otra oportunidad ¿Porque escribió lo que diría y no lo uso? Al tenerla de frente guardó silencio, que tontería tan grande, obviamente el pánico se apoderó de él, había una razón, ella era hermosa, muy hermosa ¿Cuantas veces se puede tener la fortuna de mirar a una mujer así? Todas son hermosas, sin embargo, solo ella pudo entrar en su corazón. La conoció tiempo atrás, no en el colegio como muchos pudieran pensar, ni con amigos, fue al instante y un encuentro muy especial. No entraré en detalles pues me llevaría algo de tiempo explicarlos, solo les puedo decir que el amor a primera vista existe ¡Claro! Aunque se rían ¿Quien no se ha enamorado de esa forma? ¡Muchos! Pero olvidan ese momento, un segundo basta y sobra para saber que el amor esta enfrente. 
La conoció de esa manera, casual y divertida. Se saludaron, salieron, disfrutaron. Pero no se equivoquen, disfrutaron de la compañía mutua, de la platica, del jugueteo. El amor así se siembra, el instante te da la semilla y uno sabe si la toma y hace buen uso de ella o la deja en un terreno no fértil. Ellos pusieron entonces sus manos al amor, y sembraron juntos como debe de ser. No hubo poder de uno sobre de otro, nada de eso, ellos entablaron un diálogo sumamente importante ¡El del alma! Porque el alma tiene voz ¡Claro que si! El ser humano la ha ocultado por tonto, al pensar que la voz interior no es necesaria. Y la voz no es hablar de uno sino escuchar al otro. 
Fue así que ellos se escucharon, en silencio, sin hablar, solo mirándose. 
Se preguntarán ¿Que escribió? ¿Que olvidó decir? ¿Porque ésta perdiendo su más grande oportunidad? 
En un papel solo escribió dos palabras, aunque sabía su importancia no las leería, las diría de memoria. Pero quiero explicar que memoria será entendida de manera diferente. Hablo de memoria más allá de la mente, una memoria que olvida lo material y se centrará en el ser, en lo espiritual. Del amor que se brinda sin reglas, sin sentido de posesión, del amor del ser uno mismo, libre en su totalidad. 
Entonces él escribió solo dos palabras para ella, pero no las leyó porque ella ya las sabía. Esa tarde un gran ramo de orquídeas fue entregado, el beso lo dijo todo, era una promesa sin firmas terrenales. Las manos se unieron en libertad, no hubo límites religiosos, ni reglas sociales, pues para el amor solo es necesario dos almas que unidas se digan ¡Te Amo!


Autor 
Mauricio Zamora 
Seudónimo 
Corazón de Muñeco 
Xalapa 2017