martes, 21 de agosto de 2018

Un minuto antes de morir

Un minuto antes de morir

Varias patrullas llegaron en ese instante. Toda el área había sido acordonada y se retiraba a la gente. En el piso un cuerpo fue cubierto con una sabana blanca. En la esquina una joven cubría sus ojos llenos de lágrimas. A sus pies un ramo de girasoles perfectamente arreglado. En la otra equina los dueños del local pedían a los clientes retirarse, era un café muy concurrido. En la puerta un joven hacía señas a la policía, pero éstos no tomaron en cuenta su llamado. Un autobús escolar pasó en ese instante, los pequeños intrigados miraron un cuadro desconcertante. El cuerpo era levantado por camilleros y subido a una camioneta forense.
Un segundo antes la joven había discutido con su novio, la pelea empezó por haber llegado tarde. Él no había olvidado su cumpleaños, sin embargo el retraso fue a causa del empleado de la florería, como era nuevo, tardó un poco en hacer ese arreglo floral. Cuando terminó llevaba solo 5 minutos de retraso, por lo que aún estaba a tiempo.
El joven de la esquina hizo lo que pudo para hacerse notar, él pudo ver todo, un ladrón fue el que asalto el comercio donde trabajaba. Una llamada lo quito del mostrador, del otro lado de la línea el novio de la muchacha hacia una reservacion mientras le terminaban de hacer su arreglo floral. Por eso no estuvo al frente durante el asalto, el ladrón no pudo llevarse nada ya que a esa hora no había dinero en efectivo.
El ladrón salió corriendo y a su paso por huir tropezó con el novio de la muchacha, haciéndolo tirar el arreglo floral a los pies de la joven. Los novios estaban discutiendo cuando el asaltante los encontró en el camino.
El muchacho siguió al ladron pero en la persecución fue atropellado por un conductor en esa misma esquina. La joven corriendo se apresuró en ayudarle, mientras el ladrón era abatido por la policía. Las señales que hizo el otro joven del café fueron oídas por las autoridades.
Un celular sonó, una llamada proveniente del café al joven arrollado. La reservacion estaba confirmada. La ambulancia lo llevaría al hospital más cercano, la novia levantó el arreglo floral mientras veía como cubrían el cuerpo del asaltante. El autobús escolar no detuvo el paso, la excursion sería cancelada por el suceso.
Un minuto fue suficiente para haber cambiado esta historia, el ladrón no era lo que se pensaba. Manuel era un joven intrépido y desobediente, en una apuesta con sus amigos se vio enredado en hacer esa locura. Adelantó al camion escolar, fingió el asalto, Mario el novio lo reconoció cuando lo empujó y tiro las flores, por eso lo siguió. Por desgracia no vio el vehículo que se acerco peligrosamente y fue arrollado. Manuel no soltó el arma y metros más adelante murió. Por eso el autobús no paró, Manuel era muy conocido.
En un minuto Manuel hizo esa locura, en un minuto el novio fue arrollado, un minuto Bastó para que el nuevo florista no tuviera a tiempo las flores. Un minuto salvo al empleado del café. Sólo había que esperar un minuto a Mario para recibir ese bonito arreglo floral....

Autor
Mauricio Zamora
Seudónimo
Corazón de Muñeco

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