miércoles, 16 de octubre de 2019

Servir

Tres hombres se encontraron en el desierto, habían perdido el rumbo y por coincidencia llegaron al mismo lugar. Un roca hacia sombra pero solo uno podía tenerla, a unos metros había un poco de agua y más allá la última hoja verde para comer. Los tres morirían irremediablemente, por sed, hambre o el calor. Entre ellos se miraron ¡El primero que eligiera algo se vería como un aprovechado! Así que ninguno hizo nada y esperó a que el otro lo hiciera. El primero empezó la platica: -¡Amigos! Así como me ven, soy un gran arquitecto, yo hice un canal para abastecer un pueblo, mucha gente se sirvió y dejo de padecer la falta de agua- Los otros cruzaron las miradas, el sol cada vez era más quemante. Entoces habló el segundo: -¡Que les puedo decir! Yo acabo de descubrir la manera en curar una rara enfermedad, la sociedad médica ha hablado muy bien de mi azaña- Entre ellos se hizo una exclamacion de asombro, entonces le tocó el turno al tercero: -¡Caray! ¡Pero que barbaridad! Como es posible que ustedes estén aquí, su trabajo es admirable y verdaderamente reconocido, tenemos tres opciones, sombra, agua y comida ¿Quién tendrá la oportunidad de sobrevivir aunque sea unos días más? El arquitecto, el científico ¿O quizás yo?- Entonces los dos preguntaron al mismo tiempo ¿Tu quien eres? ¡Porque se preocupan! No tengo la preparación de ustedes y ni el talento que la gente espera. Pero les diré quien soy: "... Soy un guía del desierto que los vio perderse en su camino y hoy los regresare a salvo a su hogar.." Un pueblo los recibió con honores y gloria. La gente los celebró, sin embargo faltaba uno. Este permaneció en el desierto, no le hacía falta gloria ni fama pues ya había cumplido su trabajo., Servir. Ideas del Autor

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