lunes, 7 de marzo de 2016

El Palomo


Una mañana aquel palomo despertó., vivía en lo más alto de un árbol porque pensaba que ahí nada le pasaría., era un palomo solitario, no vagabundo, sino más bien tímido. Temprano hacia lo de costumbre, bañarse y limpiar sus alas con el pico. No acomodaba su cama, la arreglaba que era diferente. Sus cosas eran muy especiales para él. Poseían un gran valor en su vida. No era rico., sino más bien guardaba sus vivencias. Familia tenía más sin embargo parecía que solo era él y su mundo. ¿Romántico? Así era... ¿Agresivo? Jamás lo había sido... ¿Obediente? Quizás un poco... ¿Rutinario? En gran medida. Aquella soleada mañana vio por vez primera algo que cambiaría su vida... Marcaría su destino hasta el final de sus días. Posado una rama de aquel árbol, y acompañado del calor del sol., noto en la distancia una figura perfecta que lo cautivo... Él, pensó, quien será ella. Es digna de admirarse y adorarse. Y así cual flechazo al corazón se enamoró. Le cantaba desde lo alto, le daba Flores nacidas de la punta del árbol, éstas caían muy cerca de ella... Así fue cada uno de los días. El palomo se enamoró más y más. Su corazón latía con frenesí dentro de su pequeño pecho... Enviaba también cartas de amor... Era atento en ese aspecto. Mas sin embargo no bajaba de su árbol ¿Por miedo? ¡Tal vez! Pero llego el día que las Flores se agotaron, la tinta y papel se acabó., su voz ronca de tanto cantar ya no se oía, así su pecho de tanto latir ya cansado estaba. Más aun con todo esto su amor era inmenso, el más grande que pudo haberse visto. Una mañana soleada por vez primera decidió dejar su árbol y volar directamente para ver a su amada.. Bajo precipitadamente ansioso por poder verla y tocarla. Llevaba en su mente la idea de decirle a gritos su tan ansiado amor por ella, que no escatimo esfuerzo alguno por volar cielo abajo. En su pico llevando la última flor de su árbol y una carta en sus patitas, bajo. Y dando vueltas sobre el lugar donde había visto a su amor voló. Para su sorpresa ella ya no estaba.. El palomo con lágrimas en los ojos subió a su árbol y al paso del tiempo solitario murió. La imagen de su amada que todas las mañanas aparecía tampoco estaba.. Y cuenta la historia que este palomo se había enamorado de su sombra. Y al bajar de su árbol por eso a su amada no encontró.



El amor puede parecer un sueño, pero existe cuando lo hacemos nacer del corazón y vivirá por siempre al cuidarlo con detalles. Las caricias no solamente son físicas, las palabras acarician el alma, la hacen vibrar, la hacen sentir.
Los detalles son las bases que dan firmeza y constancia al amor.
El solo decir te amo, destruye cualquier barrera...
Por ello como ser humano solo déjate amar sin medida.. Sin restricciones..

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