jueves, 28 de abril de 2016

Carta del hijo desobediente

De rodillas estoy frente a ti
Tarde es para perdonar
Mi llanto te lo entrego aquí
Aunque se., que ya no me vas a escuchar!

Si grite al momento de nacer
Y sufrimiento te di desde entonces
Hoy sé que lo volverías hacer ¡Por mí!
¡aún cuando apenas me conoces!

Me has amado al saber de mi existencia
Cuidaras de mi hasta tu último respiro
Me darás consejos con tanta paciencia
Desearás ver., lo que con mis ojos miro.

Pero te callé., aun sabiendo mis errores
Con tal arrogancia oídos sordos tenía
Era adolescente y ciego en amores
Y de la vida., yo nada sabía.

Me diste tu mano., para que no callera
Abrazaste mi cuerpo., para hacerme sentir
Me miraste a los ojos para que no sufriera
Amor verdadero., de madre a morir.

Ciego y sordo fui
Porque sabía mi conducta...
De ti, huí.
Aunque callera de forma abrupta.

Consejos., me dabas
Regaños tal vez
Mi triunfo alababas
Cuando llegaba un diez.

Comida no faltó
Ni ropa ni abrigo
Tu corazón me cantó
Cuando dormía contigo.

Escuela me diste
Regalos sinceros
Tus brazos abriste
A mis pasos primeros.

Así crecí
Con tu amor y cuidado
Ya grande corrí
Y me aleje de tu lado.

Hoy ya soy viejo
Y tus palabras vienen a mi mente.
Escritas en un libro las dejo
Al que será mi suplente.

Sabias frases me diste
Producto de tu experiencia
En el alma las sentiste
Y hacen real tu existencia.

Ahora aquí estoy y grito al viento
Te extraño mama sinceramente
pedirte perdón no me dio tiempo
Arrodillado estoy., llorando de frente.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario